web Fisioterapia online |
La rotura de fibras es una lesión que se produce por un sobreestiramiento activo de un músculo concreto al realizar una actividad física, mayormente de alta intensidad.
Esta lesión puede producirse en cualquier músculo del cuerpo aunque lo más frecuente es que se produzca en la extremidad superior o en la inferior ya que son los músculos que se suelen trabajar más a la hora por ejemplo de ganar masa muscular en el brazo o en las piernas a la hora de chutar un balón o hacer un sprint.
Esta lesión puede producirse en cualquier músculo del cuerpo aunque lo más frecuente es que se produzca en la extremidad superior o en la inferior ya que son los músculos que se suelen trabajar más a la hora por ejemplo de ganar masa muscular en el brazo o en las piernas a la hora de chutar un balón o hacer un sprint.
Concretamente la rotura de fibras en los isquiotibiales (músculos de la región posterior de la pierna que van desde donde termina el glúteo hasta la zona posterior de la rodilla) se suele producir cuando se realiza una carrera continua, un sprint, se golpea un balón, se hace un estiramiento más fuerte de lo normal…debido al acortamiento muscular, descompensación de la musculatura accesoria y fatiga muscular debido al sobreesfuerzo.
Los síntomas que se notan cuando se produce la rotura de fibras, suelen ser:
- Pinchazo
- Dolor intenso como si te dieran una patada
- Impotencia funcional (incapacidad de realizar la acción de dicho músculo)
El tratamiento para este tipo de lesiones varía en función del grado de rotura ( dependiendo de lo grande que sea), por lo general suele ser un tratamiento conservador, no requiere intervención quirúrgica, para saber el tiempo se debe acudir a un centro especializado para realizar las pruebas pertinentes y saber el grado de lesión y a partir de ahí, empezar a planificar el tratamiento de dicha rotura.
Por lo general el protocolo de tratamiento en fisioterapia para una rotura fibrilar suele ser a base de:
- Aplicación de hielo: para rebajar la inflamación.
- Reposo: relativo, ya que pasadas 72h tras la lesión la rotura fibrilar empieza a cicatrizar.
- Masoterapia: una vez tenemos la cicatriz, se realizan sesiones de masaje para devolver al músculo a su tono “normal”.
- Estiramientos: cuando el músculo está en su estado previo a la lesión, debemos realizar estiramientos para que la cicatriz que se ha formado tras la lesión, vuelva a ser elástica y de esta forma volver a tener la movilidad previa.
- Notificación: ejercicios que consisten en volver a poner a prueba al músculo para que coja fuerza tras la lesión, y de esta forma se evitarán posibles recaídas.
- Reintegración a la actividad física: volver paulatinamente a realizar la actividad física previa a la lesión, corrigiendo errores que provocaron dicha lesión.
Conclusión
La rotura de fibras es una lesión que se produce por un sobreestiramiento activo del músculo, se produce al realizar ejercicio de alta intensidad como puede ser un sprint, carrera continua, chutar un balón y también por un estiramiento forzado.
Los síntomas que se desprenden de esta lesión son: pinchazo, dolor intenso e impotencia funcional.
La recuperación varía en torno al grado de lesión (dependiendo lo grande que sea la rotura fibrilar).
El tratamiento suele ser a base de hielo, masoterapia, estiramientos, notificación muscular y reintegración a la actividad física.
Artículo redactado por el colaborador de este blog “Fisioterapia-
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si te ha gustado la entrada, me encantaría que escribieras algo.
Si quieres que lea tu blog, no me pongas el enlace, ponme el nombre, así google no nos castiga a ninguno.
Graciaaas.